Una abarrotada Sala Reina de Errenteria acogió ayer una asamblea abierta y participativa para pensar y estudiar la manera de poder dar respuesta, a nivel local, a la dramática situación de los refugiados que están llegando a las fronteras europeas.
A.
Muga (Noticias de Gipuzkoa)
El alcalde del municipio, Julen Mendoza, y la
concejal de Servicios Sociales, Nagore Basurto, apuntaron que el
objetivo de la reunión era mantener un primer contacto con los
agentes y las asociaciones locales para saber de qué recursos se
disponen en el caso de que Errenteria tenga que acoger refugiados.
“Queremos crear una red de acogida para los refugiados que se
autogestione”, precisó la edil. Esta red iría más allá de
enumerar los recursos habitacionales con los que contaría la villa y
pretende dar una respuesta integral a las necesidades (educativas,
laborales, sociosanitarias, integradoras...) de los asilados con el
horizonte puesto más a medio y largo plazo.
Todas las personas y entidades que estaban
dispuestas a formar parte de esta iniciativa pudieron apuntarse en
una lista para integrar dicha red. En este sentido, Mendoza reconoció que es temprano
para concretar medidas, ya que aún no se sabe si Errenteria tendrá
que acoger a refugiados. “Estamos en una fase de desorientación y
tenemos que hacer un diagnóstico de la situación y de los recursos.
La idea es convocar más adelante otra reunión cuando se tenga más
información y se puedan tomar acciones más concretas”, añadió.
Por su parte, Basurto indicó que el Ayuntamiento de
Errenteria ya había tomado algunas iniciativas, como donar 5.000
euros a Acnur. El alcalde añadió que, probablemente, hoy el
Consistorio aprobará por unanimidad una declaración institucional
en la que la villa galletera se declara ciudad de acogida para
refugiados.
La asamblea de ayer contó con la presencia de
expertos en la materia como Peio Aierbe de SOS Racismo y Mugak y
Rosabel Argote de CEAR (Comisión de Ayuda al Refugiado) que
contextualizaron la situación actual.Ambos expertos hicieron hincapié en el peligro que
hay de que se hable de refugiados de primera clase y otros de
segunda. “Se ha creado una gran concienciación por el pueblo
sirio, pero dramas parecidos se viven en Mali, Costa de Marfil,
Congo...”, advirtieron. Asimismo, señalaron que las instituciones
tienen la obligación de atender a los migrantes y refugiados.
