jueves, 29 de junio de 2017

Los jóvenes encarcelados de Errenteria ni han compartido objetivos ni medios para ser calificados de "terroristas"

La plataforma Etorkizunaren Alde convoca una manifestación silenciosa para el domingo 2 de julio en Errenteria. La movilización tendrá lugar a las 12.30 del mediodía y partirá de la Herriko Plaza de la localidad

 
 
Los padres de los tres detenidos en Pamplona el pasado 11 de marzo defienden a sus hijos alegando que «jamás han formado parte de una organización terrorista». Junto con la plataforma ciudadana Etorkizunaren Alde  quieren mostrar este próximo domingo su oposición al auto del Tribunal Supremo, que ve indicios de terrorismo en los incidentes de la manifestación de aquel día.
 
Asier, Endika y Rubén fueron detenidos bajo la acusación de quemar contenedores y lanzar piedras a la Policía en una manifestación en la capital navarra. La manifestación, organizada por el grupo Errepresioari Autodefentsa, disidentes de la izquierda abertzale, no había sido autorizada y dio origen a fuertes disturbios y provocó daños materiales importantes. El juzgado ordinario de la ciudad abrió el proceso contra los jóvenes, que fueron detenidos y encarcelados. Pero la situación se complicó cuando el Tribunal Supremo dictó un auto por el que la causa pasaba a ser competencia de la Audiencia Nacional. La juez de este tribunal, Carmen Lamela, explicó que la decisión se debía a la presencia de pruebas de que los hechos pueden ser calificados como un delito de «terrorismo».
 
Los padres argumentan que ninguno de los tres ha compartido objetivos ni utilizado medios que puedan tener dicha catalogación. Rechazan de nuevo el auto del Supremo y recalcan que los sucesos «jamás habrían sido instruidos como hechos de terrorismo de haber acontecido en algún otro lugar del Estado español», por lo que califican el auto como injusto y arbitrario. Defienden a los jóvenes y señalan que son «concienciados y comprometidos con problemáticas sociales, sensibilizados por la injusta redistribución de la riqueza que padecemos, y han trabajado en diversas iniciativas para ayudar a los más desfavorecidos, como el banco solidario de alimentos». Por ello solicitaron la inmediata puesta en libertad de sus hijos, que llevan ya más de 100 días en prisión.
 

miércoles, 28 de junio de 2017

Julen Mendoza, Alcalde de Errenteria: "“Recuperar a la persona y renunciar a la imagen del enemigo”

Errenteria se convierte en el primer Ayuntamiento gobernado por EH Bildu en celebrar un acto de homenaje expreso a las víctimas de ETA. "Este acto lo que pretende es humanizar lo deshumanizado. Es poner vida, a través de sus seres queridos, a la muerte. Es recuperar a la persona y renunciar a la imagen del enemigo. Es, en definitiva, intentar sentir como propio el dolor que hemos sentido como ajeno. Conscientes, no obstante, de que el daño producido es irreparable, que no tiene vuelta atrás, que esas personas ya no van a volver".



Palabras pronunciadas esta tarde por el alcalde de Errenteria, Julen Mendoza, de EH Bildu, máximo representante del primer Ayuntamiento gobernado por la coalición en celebrar un acto de homenaje expreso a las víctimas de ETA.

El primer edil, acompañado por representantes de todos los grupos, ha rendido homenaje a las tres víctimas mortales de ETA del municipio. Al militante del PSE y de UGT Vicente Gajate y a los dos concejales del PP de la localidad asesinados por la banda terrorista, José Luis Caso y Manuel Zamarreño.

Gajate, también policía municipal, fue asesinado a tiros en la calle el 17 de octubre de 1984. Caso murió de un disparo en la cabeza el 11 de diciembre de 1997, cuando se encontraba en el interior de un bar de la calle Juan Arana de Irún. Mientras que su sustituto en el cargo, Zamarreño, fue víctima de un atentado con una moto-bomba perpetrado el 25 de junio de 1998 en su barrio de Capuchinos.

Durante el acto la viuda de Caso y la hija de Zamarreño han leído sendas semblanzas, mientras que en el caso de Gajate, la encargada de leer su perfil ha sido la presentadora del acto, ya que su viuda no se ha sentido con fuerzas para acudir al acto.

Los familiares de las víctimas han sido recibidos en las puertas del edificio Consistorial por el alcalde del municipio y otros representantes políticos, además de por cuatro txistularis. Posteriormente, se ha descubierto una placa junto a la entrada del salón de plenos en recuerdo de Gajate, Caso y Zamarreño, para luego dar paso a los discursos.

El encargado de cerrar el acto ha sido Mendoza, quien no ha dudado en pedir perdón a las víctimas. 

"Si en algún momento este Ayuntamiento a lo largo de su historia, o yo mismo, no hemos estado a la altura de las circunstancias, no os hemos acompañado correctamente a vosotros o a cualquier otra [víctima], o hemos dicho o hecho algo que pudiera haber añadido más dolor al que ya padecéis, pido perdón por ello en nombre del Ayuntamiento y en el mío propio, a la que vez que digo que haremos todo lo que esté en nuestras manos para que no se vuelva a repetir".

Cadena SER

Homenaje municipal en Errenteria a Vicente Gajate Martín, José Luis Caso y Manuel Zamarreño

El Alcade Julen Mendoza ha hecho autocrítica porque al "conjunto de la sociedad", en la que se ha incluido en primera persona, le faltó en aquellos tiempos "la imaginación suficiente para ponerse en el lugar del otro".



Su alcalde, Julen Mendoza (EH Bildu), que gobierna en coalición con el grupo Errenteria Irabaziz, se ha caracterizado en las dos legislaturas que lleva al frente del Ayuntamiento por su postura conciliadora y la celebración de distintos actos en favor de la convivencia ciudadana y el reconocimiento al sufrimiento de todas las víctimas en su localidad.El Ayuntamiento guipuzcoano de Errentería ha organizado un acto como reconocimiento institucional y ha servido para recordar las figuras del policía municipal y militante socialista Vicente Gajate Martín, asesinado en 1984; y los concejales del PP en Errenteria José Luis Caso, muerto en 1997, y su sustituto en el cargo, Manuel Zamarreño, fallecido en 1998.

Este acto, que ha tenido lugar en el salón de plenos, con la asistencia de representantes de todos los partidos de la corporación, y antiguos ediles de las distintas formaciones políticas -incluidos algunos de la izquierda abertzale como Anjel Mari Elkano y Manu Ugartemendia-, pretende dar continuidad al camino emprendido en el reconocimiento institucional de las víctimas de la violencia del municipio.

En el acto celebrado esta tarde han participado familiares y amigos de los tres homenajeados, además de representantes municipales de EH Bildu, PSE/EE, PNV y Errenteria Irabaziz, así como miembros del PP local, que no cuenta con representantes municipales en la corporación actual.

Vicente Gajate, policía municipal de Errenteria, de 34 años, militante socialista y afiliado a la UGT, fue asesinado a tiros en la calle el 17 de octubre de 1984, cuando regresaba a su domicilio tras haber finalizado su jornada laboral.

José Luis Caso, de 64 años y concejal popular de Errenteria, murió de un disparo en la cabeza el 11 de diciembre de 1997, cuando se encontraba en el interior de un bar de la calle Juan Arana de Irun.

Su sustituto en el cargo, Manuel Zamarreño, fue víctima de un atentado con una moto-bomba perpetrado el 25 de junio de 1998 en su barrio de Capuchinos que también ocasionó heridas de metralla al agente de la Ertzaintza que lo escoltaba cuando se dirigía a comprar el pan en un establecimiento cercano a su domicilio.

Las semblanzas vitales de todos ellos han sido desglosadas en el salón de plenos por sus familiares, Juani, viuda de José Luis Caso; Nahiara, hija de Manuel Zamarreño, y Aitziber Blanco, quien ha leído una carta sobre Vicente Gajate escrita por su viuda, Puri, que no se ha sentido con fuerzas para asistir al acto.

Momentos antes todas ellas junto al alcalde habían descubierto una placa conmemorativa situada a la entrada del salón de plenos, mientras un grupo de txistularis entonaba el "Txoria Txori" y los presentes prorrumpían en aplausos.

En la parte final del homenaje ha tomado la palabra el alcalde de Errenteria, Julen Mendoza, quien ha hecho autocrítica porque al "conjunto de la sociedad", en la que se ha incluido en primera persona, le faltó en aquellos tiempos "la imaginación suficiente para ponerse en el lugar del otro".

"Este acto lo que pretende, ante todo, es ser humano. Es humanizar lo deshumanizado. Poner vida, a través de sus seres queridos, a la muerte. Es recuperar a la persona y renunciar a la imagen del enemigo. Es en definitiva intentar sentir como propio el dolor que hemos sentido como ajeno. Conscientes no obstante de que el daño producido es irreparable, que no tiene vuelta atrás, que esas personas ya no van a volver", ha dicho Mendoza.

"Si en algún momento este Ayuntamiento a lo largo de su historia, o yo mismo, no hemos estado a la altura de las circunstancias, no os hemos acompañado correctamente -a las víctimas- o hemos dicho o hecho algo que pudiera haber añadido más dolor al que ya padecéis, pido perdón por ello en nombre del Ayuntamiento y en el mío propio, a la vez que digo que haremos todo lo que esté en nuestras manos para que no se vuelva a repetir", ha concluido.

Seguidamente, Mendoza ha entregado unos ramos de flores a la viuda de Caso y a la hija de Zamarreño, entre los aplausos de los asistentes, tras lo que un guitarrista ha interpretado una pieza de "El concierto de Aranjuez", que ha dado por concluido el homenaje.