Nos ofrecernos como municipio de acogida no solo ante la actual crisis del barco Aquarius, sino para futuras coyunturas y necesidades de refugio para personas perseguidas por la miseria y la guerra.
El Ayuntamiento de Errenteria, en el Día Internacional de las Personas Refugiadas, manifiesta:
Según la legislación vigente, la obligación de las instituciones públicas de proteger a las personas que huyen buscando protección es asumida y compartida por multitud de países. Las políticas neoliberales y austeritarias que han sido llevadas a cabo en la última década desde la Unión Europea, han servido de gasolina y han generado un terreno propicio para la guerra del pobre contra el más pobre, allanando el camino al crecimiento de la ola de discursos e ideologías xenófobas y racistas que van peligrosamente arraigando en la sociedad europea.
Uno de los objetivos de la misma fundación de la Unión fue fomentar una convivencia pacífica de las naciones europeas y la no repetición de la catástrofe humana que supusieron los ascensos de los monstruos del fascismo y la extrema derecha en la oscura década de los 30. El actual ascenso de fuerzas abiertamente de extrema derecha por casi todo el continente (Jobbik en Hungría, Frente Nacional en Francia, la Lega Norte y el Movimiento 5 Estrellas en Italia, UKIP en Reino Unido, AfD en Alemania, FPÖ en Austria y un largo y terrorífico etc) con discursos de odio hacia las diferentes, nos recuerdan peligrosamente a los monstruos del pasado.
La última decisión del gobierno italiano, bajo la dirección política del partido ultraderechista y xenófobo de la Lega Norte, de dejar a la deriva y esperando la muerte de 629 personas que huyen de la guerra y la miseria, es simplemente un escalón más en el actual escenario. La deriva de la Unión Europea va demostrando que es preciso emprender un proceso de reflexión compartida para dar respuesta a la realidad de las migraciones humanas y del aumento sistemático de personas refugiadas en el mundo que no tiene parangón en la historia. Europa tiene un papel fundamental en la responsabilidad de los desplazamientos de seres humanos y sobre todo, una responsabilidad ineludible en mirar a las causas y contribuir a buscar soluciones estructurales ante problemáticas que distan mucho de ser coyunturales.
La situación que ha tenido lugar esta pasada semana (en el mes de junio) al respecto del rechazo de las autoridades italianas de la acogida de las 629 personas embarcadas en el Aquarius, ha sido una expresión violenta y cruel de este desajuste entre las responsabilidades de la Unión y su discurso. Y es tan condenable la actitud de Italia o Malta como el silencio cómplice del resto de países de la Unión, que además, cuando por fin dicen algo, solo hablan de aumentar el control de fronteras. Fronteras que se externalizan y matan a miles de personas cuando dejan su seguridad de manos de países como Libia o Turquía. Además de esto y dada la complejidad de competencias y funciones de cada espacio institucional, entendemos que las responsabilidades en torno a garantizar y blindar el ejercicio de los derechos humanos de las personas, tiene su misión y tiene también, sus tareas pendientes. No solo, ni de forma exclusiva en lo que tiene que ver con el lamentable hecho al que hemos asistido estas pasadas semanas, sino mirando al conjunto de la situación de estas personas migrantes y refugiadas que tienen que huir para salvar sus vidas.
Por eso el Ayuntamiento de Errenteria manifestamos e instamos:
1.- A la Unión Europea, a cambiar políticas de protección y acogida en el ámbito de las migraciones para afrontar el reto de los flujos migratorios tomando en consideración la responsabilidad del conjunto de la Unión Europea, por acción u omisión en la vulneración de la legalidad y los derechos humanos que se ha dado en cuanto a la llegada y acogida del barco Aquarius.
2.- Al Gobierno del Estado, a garantizar que la acogida a las personas migrantes y refugiadas que transitan las fronteras del conjunto del Estado Español y en concreto a las personas trasladadas desde las costas de Italia en el barco Aquarius, se realice en condiciones de calidad, respetando la dignidad de las personas, su voluntad y la legalidad vigente.
3.- Al Gobierno Vasco, a garantizar que la acogida de las personas migrantes y refugiadas que residen o transitan en Euskadi se realice en condiciones de dignidad, calidad y garantía de derechos, utilizando los sistemas de protección existentes e implementando medidas específicas y suficientes que permitan avanzar en una acogida integral y adaptada a las necesidades de las personas.
4.- A la Diputación Foral de Gipuzkoa a garantizar que en la aplicación específica de las medidas de protección social especializadas, se tengan en cuenta las necesidades particulares de las personas migrantes y refugiadas para una atención de calidad.
5.- Proseguir el esfuerzo coordinado y solidario que las instituciones vascas estan realizando.
Por otro lado el Ayuntamiento de Errenteria nos comprometemos a:
6.- Ofrecernos como municipio de acogida no solo ante la actual crisis del barco Aquarius, sino para futuras coyunturas y necesidades de refugio para personas perseguidas por la miseria y la guerra.
7.- A continuar con campañas de sensibilización en contra de los discursos de odio, xenófobos y racistas, para combatir y asegurar que estos no se reproduzcan.