jueves, 8 de octubre de 2015

El Ayuntamiento de Errenteria manifiesta su apoyo al joven saharaui Hassanna Aalia

El Ayuntamiento de Errenteria cree que la situación es “grave” y que en el caso de ejecutarse la expulsión Aalia sufrirá unas “consecuencias irreversibles”. 


En enero de 2015 el Gobierno español le negó el asilo político al activista saharaui Hassanna Aalia, y éste recurrió contra esta denegación. Sin embargo, a pesar de que la Audiencia Nacional supendió cautelarmente su expulsión, el pasado martes Aalia fue detenido en Burgos. Unas horas más tarde fue puesto en libertad, pero le han dado 15 días para dejar el estado español. Aalia recurrirá también a esta orden.

El Ayuntamiento de Errenteria cree que la situación es “grave” y que en el caso de ejecutarse la expulsión Aalia sufrirá unas “consecuencias irreversibles”. Y es por eso que el Ayuntamiento ha decididó por unanimidad ratificar la declaración institucional que realizó el pasado 4 de febrero del 2015. En dicha declaración, además de manifestar el apoyo y la solidaridad con Hassanna, el Ayuntamiento de Errenteria solicita al Ministro del Interior de España que intervengan en el asunto y que se reconsidere la petición de asilo político. Asimismo, menciona que están “preocupados por la vulneración de los Derechos Humanos en el Sáhara Occidental por parte del Gobierno de Marruecos”.

Situación de Aalia
En 2010 Aalia participó en el campamento de protesta pacífica de Gdeim Izik. Por este hecho fue juzgado y sentenciado a cuatro meses de prisión. En octubre de 2011 viajó a Bilbo con una beca de estudios, y cuando le faltaba poco para regresar a Aaiún (Sahara Occidental), supo que iba a ser juzgado junto con 24 saharauis más por un Tribunal Militar, a causa de los hechos de Gdeim Izik. En consecuencia, decidió quedarse en Bilbo y solicitar asilo político al Gobierno español.

En febrero de 2013 el Tribunal Militar ya mencionado dictó sentencia contra 25 civiles saharauis, y Hassanna Aalia fue sentenciado a cadena perpetua. Desde entonces el joven activista saharaui ha estado recorriendo tanto el estado español como Euskal Herria dando a conocer la situación que viven en Sahara. En enero de 2015 el Gobierno español rechazó su petición de asilo y le otorgó un plazo de 15 días para abandonar el territorio español. En este momento Aalia esperaba la respuesta del recurso contra esta orden de expulsión.