El
documento ha sido presentado Xenpelar etxea.
Sin embargo, no se trata de un documento definitivo, y es que además
de las aportaciones que se han recogido y se recogerán en él, este
protocolo deberá adaptarse a la realidad de cada momento. Así lo
han explicado la concejala del departamento de diversidad cultural,
cooperación al desarrollo y derechos humanos Nagore Basurto, la
técnica de dicho departamento Samira Goddi y Maitane Barrenetxe de
Aztiker. Aztiker ha trabajado junto con el Ayuntamiento en el
desarrollo del proceso participativo para diseñar el protocolo, además de representantes de diversas asociaciones que han participado
en este proceso
El
objetivo principal de este proceso de unos ocho meses es reflexionar
sobre los recursos para ofrecer una apropiada acogida a las personas
que vienen a vivir al municipio. De alguna manera el Ayuntamiento
pretende proporcionar a las personas recién llegadas medios para
crear relaciones con las y los vecinos así como con agentes. Basurto
ha mencionado que el Ayuntamiento tiene el compromiso de garantizar a
toda la ciudadanía derechos e igualdad de oportunidades, y ha
añadido que ven la diversidad cultural como valor positivo.
Goddi
ha explicado que hace un año, cuando se creó el área de diversidad
cultural, ya había un diagnóstico sobre el tema. Pero más allá,
percibieron la necesidad de reflexionar sobre la acogida. Es así que
junto con Aztiker y con el apoyo de la Diputación Foral de Gipuzkoa
comenzaron el proceso. El Ayuntamiento cree que dando la apropiada y
adecuada información en un primer momento, mayor será la
participación de la persona recién llegada, lo que “aportaría en
la convivencia y la cohesión”. En ese sentido, el protocolo que ha
presentado el Ayuntamiento es “multidireccional”. Se ha trabajado
en tres ámbitos generales, institucional, comunidad educativa y con
asociaciones y agentes de diferentes ámbitos.
Proceso
participativo
Comenzaron
el proceso en junio de 2015.Y Barrenetxea ha explicado que el trabajo
se ha realizado en tres fases generales. Primeramente, realizaron un
diagnóstico de la acogida de Errenteria, y estudiaron los puntos
débiles y fuertes de este ámbito. Después de verano, por su parte,
diseñaron las bases del protocolo y profundizaron en ellas mediante
entrevistas que realizaron con unos 20 agentes sociales de diverso
índole. Así hicieron el esbozo del protocolo y realizaron tres
“sesiones de contraste”. Una con agentes del ámbito educativo,
otra con la plantilla técnica y la última con agentes y
asociaciones. Una vez realizados todos estos trabajos, completaron el
documento y el DVD.
Impulsar
las relaciones
Según
Barrenetxea,este protocolo tiene tres ejes fundamentales. Por una
parte, pone en valor los espacios de primer contacto que hay a día
de hoy. Además, ha explicado que el protocolo conlleva “un cambio
de chip” en el Ayuntamiento, tanto a la hora del padrón, como a la
hora de ofrecer otros servicios. Y por último, ha recalcado que más
allá del padrón, este protocolo pretende abrir puertas a todo un
proceso de integración. Ofrecerá medios para impulsar las
relaciones socio-afectivas entre toda la ciudadanía. Ahora
quieren completar una guía que recoja todos los recursos que hay en
Errenteria. Esa guía se publicará en diferentes idiomas y será la
continuación de este proceso.
Aportaciones
Han
sido muchos los agentes que se han implicado en el proceso, así como
la plantilla técnica del Ayuntamiento o los grupos políticos del
mismo. Varias de las aportaciones recogidas en la última fase ya
están en el documento presentado hoy, pero Basurto ha explicado que
tienen que agregar todavía más aportaciones. Y ha animado a toda la
ciudadanía a que haga las aportaciones que hagan falta. Además,
según Basurto el poner en marcha el protocolo les ayudará a
identificar las carencias o los elementos de mejora. Asimismo, han
añadido que el Ayuntamiento ofrecerá recursos para seguir
completando el protocolo. Por ejemplo realizarán fichas de
valoración. Y es que el documento es abierto, vivo y dinámico